Introducción
Los camélidos sudamericanos comprenden cuatro especies: la llama (Lama glama), la alpaca (Lama pacos), el guanaco (Lama guanicoe) y la vicuña (Vicugna vicugna). La llama y la alpaca son especies domésticas, mientras que el guanaco y la vicuña son especies silvestres. El Perú es el principal productor de camélidos sudamericanos del mundo con poco más de 5 millones de cabezas entre las cuatro especies, de las cuales, 3 millones 596 mil 753 son alpacas y representan más del 85% de las existentes en el mundo (CONACS, 2005).
La vicuña presenta una de las fibras de origen animal más finas del mundo, la cual se utiliza como insumo para la confección de telas y prendas de vestir de alta calidad, con una demanda concentrada principalmente en Italia, Inglaterra, Alemania y Estados Unidos (FIA, 2008). La población de vicuñas se estima en 302.210 ejemplares, y los principales países productores de fibra son Perú, Argentina y Bolivia (CONACS, 2005). En Perú, la estrategia utilizada para el desarrollo del mercado para la fibra de vicuña se basa en la integración de políticas del Estado, la empresa privada y empresas textiles. Esto origina que exista una oferta permanente de fibra en el mercado, con precios comunales medios y un alto valor agregado (Galaz y Gonzales, 2005).
En el año 1979 fue creada la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca (RNSAB), con el propósito de conservar y manejar las poblaciones de vicuñas para el aprovechamiento de su fibra (Zeballos et al., 2010; Davies, 2003). Para ello, se han desarrollado dos modalidades de manejo de vicuñas: manejo en cautiverio y manejo en silvestría, y esta última es la que presenta mayores dificultades para obtener cálculos de aprovechamiento para toda la RNSAB.
Si bien la valoración económica de bienes y servicios que brinda la diversidad biológica de las Áreas Naturales Protegidas (ANP) tuvo un gran avance conceptual y metodológico en los años 90 (Glave y Pizarro, 2001), muy poco se ha logrado en términos de su puesta en marcha en aplicaciones prácticas y políticas públicas en el sur del Perú. Por tanto, el presente estudio tuvo como objetivo valorar económicamente la producción de fibra de vicuña en la RNSAB, basado en los lineamientos propuestos por la legislación nacional (MINAM, 2014; MINAM, 2015).
Metodología
Área de estudio
La Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca (RNSAB) es una de las principales ANP del Perú, que resguarda una muestra representativa de la Puna Seca en el suroeste del país (Figura 1). Se ubica en los departamentos de Arequipa y Moquegua, y ocupa un área de 366.936 ha, en un rango altitudinal que va de los 2.800 a más de 6.000 m de altitud.
La flora de la RNSAB consta de más de 463 especies de plantas vasculares, y las Asteraceae y Poaceae son las familias con mayor número de especies; mientras que la fauna de vertebrados suma 207 especies, conformadas por 37 mamíferos (34 nativos y 3 introducidos en estado silvestre), 158 aves, 5 reptiles, 4 anfibios y 3 peces (2 nativos y 1 introducido) (Zeballos et al., 2010).
Métodos
La densidad poblacional de vicuñas en la RNSAB fue evaluada con ayuda de censos en transectos lineales (Tellería, 1986), durante el mes de febrero de 2018 (Tabla 1). Para ello, se utilizaron las principales vías de acceso que existen en la RNSAB, las cuales fueron recorridas en camioneta a una velocidad promedio de 20 km por hora, entre las 8:00 y las 11:00 hrs. Los avistamientos fueron realizados por dos personas, y se registró el número de individuos y la distancia perpendicular de los individuos al transecto, ubicados dentro del ANP (Soriguer et al., 1997). La densidad de vicuñas fue calculada con ayuda de los estimadores implementados en el Programa Distance 6.0 (Buckland et al., 2004).
La Gerencia Regional de Agricultura de Arequipa (GRAG) es la entidad del Estado encargada de promover y fiscalizar el aprovechamiento de la fibra de vicuña, motivo por el cual se solicitó la siguiente información a la GRAG: a) número de vicuñas esquiladas; b) peso de fibra de vicuña que se obtiene de cada animal esquilado; c) precio del kilo de fibra de vicuña en los últimos 10 años. Dicha información fue resumida en porcentajes y promedios, los cuales se extrapolaron a la población estimada de vicuñas que habitan en la RNSAB, para obtener finalmente el valor económico asociado al aprovechamiento de la fibra de vicuña en el ámbito del ANP.
Resultados
Densidad
Durante los censos en transectos lineales se obtuvo un total de 202 avistamientos de vicuña, utilizando un esfuerzo de muestreo total de 612.28 km censados distribuidos en 43 transectos recorridos (Tabla 1).
Según los análisis del Programa Distance 6,2, la función Hazard Rate, con la serie de expansión Hermite polinomial, fue el modelo que mejor se ajustó a la distribución de las distancias perpendiculares registradas (AIC = 2482,2), estimando una probabilidad de detección de 20,13% (IC 95% = 15.988 - 25.347; CV = 11,72%), una amplitud de banda efectiva de 181,17 m (IC 95% = 143,89 - 228,12; CV=11,72%) y un tamaño promedio de grupos familiares de vicuña de 4,22 individuos/grupo (IC 95% = 3.7562 - 4,7495; CV = 5,95%) (Figura 2).
El modelo estimó una densidad poblacional de 0,0091049 grupos de vicuña/hectárea (IC 95% = 0,0057142 - 0,014508; CV = 23,69%) y de 0,038457 individuos/hectárea (IC 95% = 0,023820 - 0,062088; CV = 24,43%). El componente que más aportó a la varianza de la densidad fue la tasa de encuentro 71%. Dichos valores de densidad presentaron bajos valores de variación (CV < 30%), corroborando la confiabilidad de cálculos realizados.
Considerando la densidad de vicuñas obtenida durante el presente estudio y la superficie de la RNSAB (366.936 ha), se estimó una población de 14.111 vicuñas que habitan en la RNSAB.
Valoración económica
La información proporcionada por la GRAG mostró que la venta de fibra de vicuña no responde a un modelo económico básico de libre oferta y demanda, debido a que el precio por kilogramo de fibra se mantuvo relativamente estable durante seis años de comercialización (U$D 352,86). Además, se observó que, en promedio, sólo el 39,98% de las vicuñas capturadas fueron esquiladas (Tabla 2).
Considerando una población de 14.111 vicuñas para la RNSAB, el porcentaje promedio de vicuñas esquiladas, el peso promedio de fibra que se puede obtener en un animal y el precio promedio de un kilo de fibra, el valor económico generado por el aprovechamiento de fibra de vicuña en la RNSAB alcanzó un total de U$D 384.209,60.
Discusiones
La valoración económica de servicios ambientales es un tema relativamente nuevo en el Perú, para el cual existen limitados estudios en ANP (Glave y Pizarro, 2001; Loyola, 2007; Gómez et al., 2012). Uno de los primeros esfuerzos por conocer el valor económico de la diversidad biológica en ANP del Perú fue desarrollado por Glave y Pizarro (2001), quienes, a través de un programa de becas en investigación, capacitaron a profesionales del sector público ligados al sector ambiental en herramientas de valoración económica.
Dentro de la clasificación delas ANP, las Reservas Nacionales se encuentran destinadas a la conservación de la diversidad biológica y la utilización sostenible, incluso comercial, de los recursos de flora y fauna silvestre bajo planes de manejo (SERNANP, 2018). Como ejemplo, las Reservas Nacionales de Pucacuro y Pacaya Samiria, ubicadas en las regiones de Loreto y Ucayali, han llevado al límite el aprovechamiento de fauna silvestre tras promover la comercialización de carne de monte de “huangana” Tayassu pecari, “sajino” Pecari tajacu, “venado rojo” Mazama americana, “venado gris” Mazama nemorivaga y “majas” Cuniculus paca, con base en estudios previos de valoración económica y bajo estrictos planes de manejo (Aquino et al., 2007; Pérez-Peña et al., 2016).
La RNSAB fue concebida como una nueva área para la conservación y el manejo de la vicuña, en vista de que en la zona se encontraron condiciones óptimas para su supervivencia y se contaba con la experiencia del exitoso programa de manejo de vicuñas de Pampa Galeras (Zeballos et al., 2010). Para el año 1980, la población de vicuñas en la RNSAB se estimaba en 1.367 individuos. Sin embargo, dicho número se ha visto incrementado hasta alcanzar entre los 11 y 12 mil ejemplares para el año 2016 (Walter Vega, com. pers.). Dichos valores fueron obtenidos mediante técnicas de censo tradicionales y utilizando una gran cantidad de personal y recursos logísticos. No obstante, concordamos con Gallardo et al. (2010), quienes, utilizando menor cantidad de recursos y herramientas informáticas, lograron resultados similares a los obtenidos con técnicas de censo tradicionales (Buckland et al., 2004; Pérez-Peña et al., 2016).
Las campañas de esquila de vicuña en la RNSAB se realizan frecuentemente entre los meses de agosto y noviembre de cada año, efectuando la esquila efectiva de sólo el 39,98% de vicuñas capturadas (GRAG, 2018). En los últimos 10 años, la producción de fibra de vicuña en la RNSAB ha sufrido fluctuaciones importantes, llegando a obtenerse desde 165 kg de f ibra en el año 2012 hasta 505 kg en 2015, la cual ha sido vendida a un precio relativamente constante durante dicho periodo (U$D 352 en promedio). Este panorama evidenciaría un monopolio del mercado de la fibra de vicuña, lo cual es preocupante debido a que el Perú es el país con la mayor población de vicuñas de Sudamérica (Quispe et al., 2009).
Conclusiones
La implementación de un diseño de muestreo adecuado y el uso de herramientas informáticas se presentan como una alternativa rápida y eficiente para estimar la densidad poblacional de vicuñas en la RNSAB.
El valor económico de la fibra de vicuña en la RNSAB fue de 384.209,6 dólares americanos, cifra que se aproxima al monto máximo que se podría obtener por la esquila de toda la población de vicuñas que habitan en la RNSAB.